Luego de las compras [Priv]

-Asintió con la cabeza, después de todo, a este punto ya casi nada le avergonzaba.
Puees~.. Senti algo tibio y suavecito en mis labios... Pero recuerda que estaba dormido.
-Admitió ignorando su sonrojo.

- Jaja

No pudo reprimir sus risas, y cerró los ojos sonriente.

- Vaya...¿o sea que de haber estado despierto habrías sentido más?

No lo se..
-Respondió, cerrando los ojos y acurrucandose en las sábanas de nuevo, escondiendo su cabeza también.

Por lo menos haía huído de la pregunta que Kiba le había hecho. Se puso bocarriba con las manos sobre el pecho, mirando al techo "filosofando" los hechos. Pero por lo menos no se había quedado conlas ganas de un beso, lo que le hizo senitr victorioso.

- Aun no quieres pararte?

Nop..
-Murmuró desde debajo de las sábanas. Podía presentir que el otro pensaba que se había librado de él.
Ahora, respondeme la pregunta o no te dejare almorzar.

- Pero yo solo ceno~

Intentó escabuirse pero al silencio del otro pensó que seuiriía insistiendo hasta que no le dijera algo prudente.

- Hmm...porque me gustas?

Mmmh.. ¿Estás mintiendo?
-Cuestionó tranquilo, jugueteando con sus dedos debajo de las sábanas.

- Hmm...no, creo que no o_ò

CRuzó ambos brazos trás sus cabeza, mirando aún al techo con aire despreocupado.

Wow... ¿Etonces también admites que no soy feo?
-Aprovechó la oportunidad para preguntar también, solo quería escuchar su respuesta, mientras se aguantaba la risa.

- Oh claro que lo eres...

Bostezó desenredandose el cabello con los dedos mirandole de reojo.

- Acabo de darme cuenta de que tengo mal gusto

La respuesta lo decepcionó un poco, pero de todas formas no esperaba que dijera algo como "Eres el más guapo del mundo" (xD)... Después de todo, seguía hablando con el mismo vampiro de siempre.
-El mio es peor.
Susurró, casi inaudible.

- Tonto~

Ahogó una risa con los ojos cerrados y luego entreabrió uno para preguntar sin entender que relación posible podía haber.

- ¿porque lo dices?

¿Debería importarte?
-Replicó, sonriendo de lado por debajo de las sábanas.
Comenzó a jugar con un hilo desprendido de éstas, riendo a veces en voz baja ignorando al otro.

- ¿Para que perdería mi tiempo en preguntarte, entonces?

Se talló los ojos girandose de costado otra vez en el colchón, entrandose como de costumbre solo un bulto bajo sus sábanas de seda.

- Di~me

Noo~...
-Canturreó, jugando aún con ese hilito que lo entretenía.

- Andaa~

Canturreo tambien moviendole con un brazo sobre las cobija

- Hmm si me dices puedes pedirme o preguntarme lo que quieras...bueno menos tu libertad, esa obviamente no entra enel juego...

No quiero nada, asi que no te diré.
-Dijo gozando solo del placer de molestarlo. Era tan hermoso ver como se desesperaba si no obtenía lo que quería..

- ù_ú vamos Kiba...

GUardpo la calma respirando lentamene, tomando un rpofundo respiro y comenzando a mover el pie en el colchón exasperandose.

- Qupe te cuesta decirme, mocoso? Además, para tu información aquí el único que guarda secretitos soy yo ¬¬ Así que deja de hacerte el interesante y dime ya

¿Qué era lo que le tenía que decir? Ya se le había olvidado, pero de seuro que era importante.

MMmmh.. Está bien, te diré con una condición.
-Accedió al fin, sonriendo con malicia. Se destapó la cabeza y se lo quedó mirando.
Si nunca más me guardas "secretitos" te diré ^^

¬¬##

Miró la maraña de cabellos que emergían de entre las sábanas y con cara de no creerle mucho, le contestó.

- Aja claro, como digas...ahora dime ò_ó

No-op~, tu tienes que decirmelos primero.
-Condicionó previamente, comenzando a peinarse con los dedos. Se sentó en la cama, apoyando la espalda contra la cabecera.

- Esa es trampa! o_ó

Le reclamó poniendole mala cara mirandole desde abajo.

- Además no se me ocurre ningún secreto ahora para contar ¿algo que quieras saber?

Accedió sin ganas de discutir, no negaba que disfrutaba bastante esas conversaciones con el chico en la cama.

Mmmh~.. Supongo que habrás tenido más sirvientes antes de mi.. ¿Los mordiste hasta matarlo?
-Cuestionó abriendo grandes los ojos, atento a la pregunta. Le agradaba verlo desde allí arriba, se veía algo... simpático.

No tuvo que pensar mucho la respuesta obvia.

- Hmm, sí a algunos...en realidad no han sido mucho, no me gusta matar o maltratar por lo que pago, creo que te lo había dicho ya

Frunció el ceño, y resbaló su espalda por el respaldo, aunque sin quedar completamente recostado.
-¿Y a mi me matarás también?
Se atrevió a preguntar, aunque dudaba si queria escuchar la respuesta en caso de que fuera desfaborable para su persona.