Compras [Kiba]

- Así es...tenemos que llegar pronto a casa, no te puedes domir, resiste hasta la cama...

Le sugirió, sonriente acomodnaodle el cabello, recordando sus cartas en el pecho, donde metió la mano para asegurarse que estuvieran aún asi.

No... no puedo más.
-Y cerró los ojos rendido. De un segundo a otro podía pasar de estar super enérgico a ser un peresozo.

- Oh me harás cargarte todo el jardin y las escaleras?

Le susurró, con los ojos cerrados. Sorprendido una vez más por sus cambios de humor tan raros.

- Ya casi llegamos~

Leves y tiernos ronquiditos eran provenientes de entre sus labios, acurrucado en el sofá, y sin ser conciente de nada de lo que pasaba en el exterior.

o.ò

De todas formas se había dormido. Suspiró apoyandose en el puño, mirando por la ventana, acariciando detrás de sus orejas ocmo lo haría con un perro durmiendo y siguió el camino hasta la casa, en uno de esos minutos, volteó a verle con expresión seria. Rayos, cuando lo había bañado, su piel se había sentido tan bien y ahora estaba tan cansado y dormido que no sentiría nada ¿No?

Echó los ojos hacia atrás descartando la idea, temiendo ás que nada a sus ataques de histeria y volvió a mirar por su ventana.

Como siempre sus manos y pies comenzaron a moverse entre sueños, mientras en su cara modulaba expresiones distintas a cada momento.

Sus cara sin duda eran muy simpáticas a las que sonrió, sin detenerse, bajando su poco la mano, por la oreja, hasta llegar su cuello con los mismos movimitnos, pero en esa zona se hicieron más suaves, a veces tenía sueños raros, loq ue le hizo dudar uninstante en seguir.

Ahora, por fortuna, no era una pesadilla. Soñaba cosas incoherentes mas por el momento eran agradables.
Sonreía a las caricias entre sueños, moviendose un poco para acercarse más a esa fuente de calor que era el vampiro.

Distraídamente coontinuó con las caricias que no dejaría hasta que el otro se quejara, paseó los dedos por su cuello y nuca, mejillas y maxilar, rpgando al auto apresurarse porque no queria quedarse a medi acarretera cunado el sol saliera.

También se le escapaban risillas inconcientes, ya casi estaba pegado al regaso del mayor... Siendo de noche y a en el lugar que estaban ya hacía frio, asi que no le convenía alejarse demaciado.

Volteó a verle y delineó el perfil de su rostro con la yema del indice, mirandole conla ceja arqueada, tragandose un bostezo. Posiblemente no era tan feo, se dijo haciendose el desentendido en sus propios pensamientos, aunque desde hace mucho sabía que no lo era ni un poco. Recordó la ocasión en que le había besado e incluso hace unas horas cuando el pequeño había dejado una frase extraña a medias y de repente sintió enormes ansias por saber lo que iba a decir.

Le acunó con un brazo y le miró pensativo, cuando por fortuna el auto coemnzaba a llegar al area de mansiones.

Mmmmh~..
-Frunció el ceño, pero pronto volvió a sonreir. Aún seguía sonrojado quien sabe porqué. Tal vez porque sabía en su subconciente que su amo lo estaba acunando, talvez por alguna otra razón indecifrable. Lo importante era que ya llegaban.

¡Porqué se sonrojaba tanto? No podía evitar derretirse en sus pensamientos cuando eso pasaba. Tomó aire que exhaló con un soplido, sosteniendole con su brazo, hasta que entraron por la extensa arboleda que iba a dar a su palacio personal, qu elemntaba nunca poder haber visto de día.

Tocó uno de sus hombros, apretandolo con afecto, evitando tener que seguir viendolo.

Se despertó de su sueño poco a poco, despues de todo no podía dormir mucho tiempo en algo que no fuera una cómoda y tibia cama.
-Ya...llegamos?
Cuestionó somnoliento, mirandió sin moverse de donde estaba.

- Si...

Retiró la mano que colcó contra el asiento.

- Aww ves? te dije que no te durmieras...

La reja se abrió, y el chofer hizo pasar al auto dentro de la casa, hasta estacionar el lujoso auto justo frente al portón,

- Ya vamos a dormir por fin, como debe ser....

Siii~..
-Susurró, escondiendo el rostro entre la ropa del vampiro. La verdad, ahora nisiquiera le importaba si estaba sobre él.
¿Me cargas? -w-