De vuelta a Casa [Kiba]

¡¡Tsss, pero tenemos que ir a jugar!!
-Replicó, aún picandole la mejilla.
Vaaamos~!! Levantate!

- Aaah, pero te dije que me ensuciaría...

Reclamó manteniendo los ojos cerrados, y haciendo mueca de querer morder el dedo que le picaba. Bostezó apretando los párpados bien fuerte y luego los entreabrió mirandole con rostro de inmensa pereza.

- Cómo vas a jugar de noche? ó.ò

Tengo mejor visibilidad de noche que un humano.
-Aclaró, sonriendo con alegría.
Y no me importa si te ensucias!! Dijiste que jugarias!

- No...no lo recuerdo...

Replicó adormilado, tallandose un ojo y bostezando repetidas cocasiones poniendose boca arriba sobre la cama, mirandolo luego de reojo.

- Bien bien...tu lavaras la ropa y coseras si algo le sucede a mis pantalones...

Le adivirtió, sentadose y estirandose los brazos, abriendo luego los ojos con una pequelísma expresión de sorpresa.

- Wow...que bien dormí hoy

Si, si si.. Coseré, arreglare, lavaré y lo que sea!! Solo juega conmigo!
-Exclamó, estirandolo de la manga de su pijama.

- Bueno...

Se frotó la cara, dejandose jalonear y agitando la cabeza un poco para espabilar un poco.

- Bien bien...y a qué vamos a jugar?

Le preguntó con la ceja arqueada levantandose de la cama y buscandose algo de ropa limpia, conla ilusion de tener algo deportivo o por lo menos viejo y roto, pero por desgracia no encontró nada. Eligió al final una camisa y un pantalón de vestir y sentado en la cama comenzó a cambiarse.

Mmmh. Subiremos muchos árboles y te perseguiré!
-Recomendó, o mas bien ordenó, levantandose y caminando hasta el baño, tomando su cepillo de dientes para comenzar a lavarse.
Tef Pfarecef Bfienf?
Le preguntó con el cepillo en la boca.

- Ooh..

Se abotonó la camisa mirandole de reojo, por el espejo.

- No podrías atraparme ni aunque quisieras...

Presumió con rostro presuntuoso, acomonadose el cabello con la mano y poniendose de pie para ir hacia el baño.

- Me parece bien...deberiamos apostar, ya que tan seguro estas...

Jajajaja, hablas como si nunca hubieras visto a un licano en acción.
-Comentó, posteriormente enjuagandose la boca y lavandose la cara. Luego, tomando un peine y peinandose.
¿Apostar?... Como qué cosa?

- No...la verdad no...

Dijo al niño sin reparos bostezando de nuevo, y lavandose la boca mientras cavilaba su pregunta.

- Mhm...no lo sé...

Se enjuagó la boca, limpiandose la humedad con una toalla.

- Ah, no se me ocurre nada, tengo todo lo qe quiero...

Dijo con cara orgullosa...además que no se le ocurría nada que el licano pudiera darle.

Pfff.. ¿Entonces para qué lo dijiste? Bobo.
-Exclamó frunciendo el ceño, regresando a sentarse en la cama.
Está bien, veamos... Si yo gano, deberás admitir que soy más inteligente y genial que tu.. Y si tu ganas... Di lo que quieres que haga, no soy un mal perdedor.

- Jajajajajaja...wow...no haré eso ¬¬

Exclamó luego de reirse, abriendole la puerta e indicandole que podia salir cuano quisiera.

- Lo que yo quiera...bien, limpiaras toda la casa, por cada rincon hasta que quede reluciente...incluso los jardines y las ajoulas de mis aves, eres joven así que no te será nada dificl....

Dictaminó con una sonrisa pacifica, esperandole a que saliera. Aunque definitivam,ente tenía que ganarle, de ninguna manera le diria esas cosas (que serían puras mentiras) al mocoso de Kiba.

- Vamos...

Se levantó tranquilo, caminando hasta la puerta.
-Claro, pero no te garantizo que limpiaré perfectamente o que todos tus plumíferos amigos esten en sus jaulas.
Le advirtió, sonriendole con un poco de malicia.
-Después de todo, jamás fui entrenado para hacer ese tipo de trabajos.

- Oh...deberás aprender...por que de todas formas te aseguro que vas a perder ;D

Le guiño un ujo, con aires de victoria, cerrando la puerta de la habitación luego de que el joven saliera, y avanzó por el largo pasillo, llegando a las escaleras y bajando por estas hasta llegar a la sala.

- Para que fuiste entrenado entonces?...pero que desgracia, un esclavo que no sabe limpiar...ó.ò

Llegó hasta el portón de la gran casa donde los sirvientes les abrierion las puertas y Osten le invitó a salir, aspiró complacido el rocío nocturnos y bajo por la pequeña escalinata hacia los jardines.

Siguiendolo a paso apresurado, deseoso de sentir la brisa del jardín, lo oía hablar.
-No fui entrenado para nada. Como ya mencioné antes repetidas veces, me secuestraron y fui directamente al mercado, donde tu me compraste.
Explicó tranquilamente, una vez estando afuera y sintiendo como la brisa le movía levemente los cabellos.

- Nada de nada...

Bufó con aires de decepción, paseandose por el cesped, las jaulas de las aves tapadas por ser de noche.

- Y bien? Que haremos primero?...Lo propondría yo, pero no sé de estas cosas...

Le dijod e pie en medio del amplio jardín com ambas manos a la cintura, respirandose el aroma a hierbas.

Juguemos a.. Las atrapadas?..
-Recomendó, rascandose la mejilla.
Basicamente no tiene reglas... Lo único que tienes que hacer es atraparme. ¿Me explico?
-Lo miraba sonriente. Hacía ya mucho tiempo que no jugaba con alguien.

- Así nada más?...bien, entiendo...

Con el ceño fruncido miró al chico, ladeando un poco la cabeza y tratando de hacerse una imagen mental del juego.

- Y que pasa si te atrapo?

Le preguntó conuna ceja arqueada, remangandose las mangas, aunque algo sorprendido por la simpleza de lo que decía, tenía la idea de que fueran aún más complicados.

La verdad es que, normalmente si me atrapas a mi me toca atraparte luego, pero si seguimos asi no llegariamos a nada y nadie ganaría.
-Murmuró caminando hacia él, y mirando el cielo.
¿Que propones para darle fin al juego?

- o_o ¿Y si es así, cómo vamos a saber quien comienza?

Dijo con expresión confundida, que juego más dificil. Al final suspiró apenas, mirando al castaño y por incercia a su cercanía despienandole el cabello.

- Creo que si ambos intentamos atraparnos a la vez, el que atrapé al otro 3 veces, podría ser el ganador...supngo o.ò

Si! Buena idea. No eres tan tonto despues de todo, ¿ves?
-Alsó la mano, picandole la mejilla unas dos veces. Luego comenzó a alejarse, hasta quedar bastante lejos del vampiró.
Bien, ¿comenzamos?

- Aww que gracioso ¬¬

Le dedicó una mala mirada, cruzandose de brazos. Ok, solo corría trás él y lo atrapaba ¿no? No sonaba fácil, además era solo un niño, aunque él llevara decadas sin correr.

- Comenzamos...

Asintió con algo de inseguridad, pero siendo su primer reflejo correr al frente para toparse con el niño.

No habían reglas, no? Entonces, podía convertirse en su forma animal, con la cual era muchisimo más rapido que con esas piernas cortas y frágiles.
De un parpadeo, se transformó en lobo, y comenzó a correr hacia el vampiro, a la vez que lo esquivaba cuando él queria atraparlo.

Cerca, tan cerca estaba pero cuando estaba por alargar la mano y jalarle, se convirtió en...en un perro. En seco se detuvo, mirandole con un dejo de sorpresa. ¿Le había dicho sobre eso? No le recordaba o no le había puesto atención. Giró el rostro corriendo para no ser el primer atrapado, lamentandose de esa nueva forma, ahora mas pequeña y escurridiza que la primera, muy listo de su parte y se apresuró agitado detrás de unos arbustos.

- Esa es trampa, sabes?!

Dijimos que era sin reglas!
-Exclamó. No sabía como diablos hacía, pero aún asi en esa forma podia hablar (xD).
Ni un segundo pasaba para trasladarse de un extremo a otro en el gran jardín, sin dejar tocarse ni un cabello. Apareció por detrás del mayor, y simplemente le saltó encima, haciendolo caer al suelo.
Jajajaja!!