Aburrido (libre)

un leve escalofrio le recorrio al sentir el aliento del mayor en su cuello, un escalofrio de placer, le miro con una sonrisa mientras se acurrucaba en el pecho del vampiro sin intenciones de soltarlo, aunque entendia bien la situacion
entonces llevame contigo... vamonos si?
no lo miro solo escondio su rostro en el pecho del vampiro disfrutando de su derrota

- Me encantaría pero... Eres un bocadillo demasiado delicioso para desperdiciarse... - Comentó - Ademas... ¿Quien se encargará del violonchelo entonces? No lo compre para dejarlo aqui...

No lo alejó de él. Simplemente dejó que el aroma que el otro despedía, le embargara. Podía sentir las venas hinchadas bajo la piel y el corazon bombeando energicamente. Era aquello lo que lo hacía tan emocionante. Saber que de un momento a otro podía decaer y, aún así, resistirlo.

aferro el instrumento en sus manos, sonriendo levemente aun escondido en el pecho del otro, el vampiro siempre hasia lo que le daba la gana, le molestaba, pero en otras ocasiones le gustaba este echo, se aserco hasta alcanzar el oido del mayor
llevame... y tocare para ti
fue inconsiente lo dicho, pero fue dicho con sensualidad y picardia

Cuando el otro se acercó a su oido, le dejo el cuello expuesto, po lo que el lo mordisqueó levemente antes de responderle, en el mismo tono.

- No seas caprichoso, Hoshi... - Pronunció - Ya va a salir el sol...

Y era verdad. El cielo, negro, comenzaba a tomar tintes violaceos, anunciando la cercanía del brillante solor en la plaza. Un poco más y quedaría "muerto". Y le dolería bastante. Sonrió con malicia, mirando al rubio.

- ¿Me dejaras ir entonces por una noche más? - preguntó, con sonrisa maliciosa.

miro el cielo, por primera vez en esa isla maldijo el alba, se separo del vampiro con cara de capricho suspirando ligeramente,
vete...
aunque tampoco queria que nada le pasara al mayor, miro a los gatitos finjiendo que le daba igual, pero se moria por estar con el vampiro

Le soltó suavemente, dejandole con el violonchelo en las manos, antes de desaparecer fugazmente, como si de una suave brisa se tratase. Cuando los primero rayos iluminaron la fuente en la que el rubio estaba sentado, era este el único que se encontraba en los alrededores de la plaza bañada por el rocio.

suspiro resignado mirando a los gatitos, la verdad el tambien tenia sueño, rio un poco al pensarlo, hasta el vampiro le habia acostumbrado a dormir de dia!, o tal vez el mismo lo hiso?.. para pasar tiempo con el?
sacudio esas ideas de su cabeza y saco un cigarro poniendose a fumar mientras se despedia de los gatitos y regresaba a la mansion para dormir un rato