Curando al almuerzo (Priv. Yoru)

El auto les dejó pornto a la entrada del palacio, loas sirvientes sacaron al muchacho del auto y él se encargó del ave y las joyas, pidiendo lo llevasen a sus habitacione sy prepararan agua caliente y todas sus cosas para hacerle las curaciones correpsondientes. Lo colocaorn en la cama, donde minutos despes Osten apareció, sentandose a su lado.

- No puedes morirte...oiste?

la ropa de cama se manchaba de sangre... una mancha roja proveniente de su espalda se hiba extendiendo por la sabanas tiñiendolo todo de rojo
habia empeorado seguia respirando con dificultad con los ojos apenas abiertos

es...u-una...orden?...

lo miro con el ojo sano

- Así es...e inapelable...

Dejo al halcón enun pequeño sofá acercandose al muchacho, suavemente le hizo ponerse bocaabajo sobre su cama, con un trapo húmedo en agua oxigenada, comenzó a pasarlo por las heridas, comenzando por los hombros y luego la espalda.

- ¿Qué estabas haciendo?

ens u espalda habia un tatuaje.. era un labeirnto muy elavorado y dificil de resolver ocupaba toda la espalda desde los hombros a la cadera de finas lineas negras y sin resolver las heridas eran en su mayoria marcas de mordidas y moretones pero bajando mas la sangre provenia de su entrpierna en donde se notaba que lo habian violado cruelmente

esperandote...

- A mí?

Contempló cuidadosamente los grabados de su espalda, quitando la sangre seca de cada raspón y cortada, cuando llegó a sus caderas, y sus gluteos, miró con desagrado aquello, limpiandolo bien tambien.

- Dios...no debiste escapar....

..solto un suave quejido de dolor tensandose y aferrandose a la almohada con fuerza sudaba ligeramente ya que le estaba dando fiebre

queria verte... pero me encontraron...

le dijo suavemente con un hilo de voz apenas...

Impávido, le colocó un par de gasas en la espalda, haciendolo girar igual de suavemente ahora de frente, tocó su frente.

- Estas delirando...duerme, aquí no te pasará nada, Yoru...

Le puso un trapo frío en la frente curandole a hora el pecho y piernas.

suspiro pesadamente y nego

no quiero dormir...

cerro los ojos pero manteniendose despierto tensandose de vez en cuando por el dolor de sus heridas

me vas a seguir queirendo?.. aunque tenga cicatrizes?....aunque ya no sea perfecto?...

tal vez si estaba delirando...

- Jajaja...de verdad, la fiebre te esta afectando...

Deicidió entonces que lo mejor era sedarlo, era lo mejor, llenó la inyeccion en una fuerte dosis lo suficiente para alguien fuerte como él.

- Voy a cuidar de Dante y de ti tambien...cuando despiertes, te esperara un deliosos baño y mucha comida...

miro la jeringa y luego a el afirmo suavemente cerrando los ojos esperando que lo inyectara

... gracias...

- Por nada, le dijo en voz muy baja...

Enterrando la ahuja en su brazo y dejando salir el liquido, hasta verle perderse en sueños, despues de eso, se lavó bien la smanos y prosiguió a curar a Dante, lo hizo despacio, afortunadamente las aves era su especialidad y jaulas lo suficientemente grandes tenía de sobra en su jardín, la desposito en una y fue a descansar un rato a su estudio, ordenando le tuvieran todo listo al otro para cuando despertara.

desperto no horas..si no un dia despues de que el vampiro lo salvara se levanto desorientado sentandose en la cama y soltando un qujido por las heridas que aun le dolian
entorno la vista mirando el lugar con atencion buscando a dante o al vampiro con la mirada

Era de día, por lo que OSten no podría estra con él. Le dejó una nota.

"Sirvete como gustes, el baño y la comida estana tu disposición igual que los sirvientes, tu bella ave, se recupera bien, esta en el jardín junto con mis demás aves.
Comportate. Te veré en la noche. Osten"

miro a nota con atencion... no sentia ganas de aser nada... no tenia ganas ni fuerzas... pero..

se levant con trabajo y se dirijio al jardon buscando a su dante lo encontro en una jaula intento entrar pero tenia candado... su halcon lo miro feliz asercandose inmediatamente a el pero caminando ya que no podia abrir sus alas
sonrio.. si dante estaba bien lo demas no importaba.,.. se sento con dificultad en el cesped y metio la mano por la jaula acariciandolo... miro el sol faltaba poco para anocheser.. hay se quedo junto a su halcon hasta que el sol se oculto...

No había tenido ganas de arreglarse, no por hoy, de hecho, mientras estuviera en casa siempre anba en "fachas". Qeu para él era una bata de seda fina, pnatalones de época ceñidos sin la necesidad de una camisa.

- Buenas noches ¿Cómo está mi paciente?

Se acercó con él desde la espalda, tocando su cabeza.

giro un poco la cabeza mirandolo

bien... eres un gran doctor...

rio un poco y se recargo en las piernas del vampiro haciendo la cabeza hacia atras para mirarlo

algun dia podre irme de aqui?... podre volver a egipto...?

su voz resultaba melancolica mientras hablaba... extrañaba su hogar

- Muchas gracias, solo lo practico como diversión...

Inconscientemente, tocó sus mejillas, pasando muy delicadamente, las yemas de sus dedos por las pequeñas cintas de curación en su cara.

- Quieres...dejarme?

Preguntó con una ceja arqeuada, sonriendole, se lo había dicho no muy enserio, solo se le había ocurrido. De esa forma, se veía tan...tan, quieto tan vulnerable.

bajo la cabeza mirando el suelo... meditando...
no
no queria dejarle ... aun que sabia que la pregunta no hiba enserio... no queria dejarle... pero tambien queria regresar a su hogar... su mente era un caos... decidio mejor callar y tomar la mano del vampiro con la suya en una leve caricia

Cerró los ojos ahogando una risilla, se hincó lentamente detrás el otro juntandolo ocntra su pecho, ahora quería una pequeña recompensa por sus cuidados.

- Ahh...mira nada más como te dejaron...

Sussurró muy suavemente contra el oído del otro, pasandole el cuello por la nuca, depositando varios besos por su cuello.

- Espero mi cena, no esté tan estropeada como se veía ayer...

Lentamente metió una mano bajo las ropas de otro para tocar su pecho.

solto un leve suspiro cerrando los ojos para disfrutar esas caricias se apoyo en el pecho del vampiro y giro el rostro para verlo

tienes hambre amo?...quieres cenar?...

dijo con una leve sonrisa quitandose la camisa dejando su pecho descubierto al igual que su cuello

La piel se le encinaba de tan solo olerle, mientras besaba lentamente de un lado y de otro su cuello.

- Mhmm...ayer no diste bocado...

Teniendole con el dorso desnudos, le paseó ambas manos por el pecho, teniendo cuidado con las heridas, paseando cuidosamente los dedos por sus morenos pezones,

- Puedes darme? Mmm?

Le miró a losojos, muy de cerca, antes de besarlo lenta pero sensualmente.

puso una de sus manos sobre una de las manos de su amo mientras soltaba un gemido en el oido de su amo al momento de sentir las caricias en sus pezones

correspondio le beso de la misma forma cerrando sus ojos y dejandose llevar por el

si usted quiere... le daria toda mi sangre...

Despacio bajó unade sus manos hasta su entrepierna sin dejar de besarle la boca a la vez que pellizcaba sutilmente ambos pezones, intercalandolos hasta dejarlos erectos.

- Ah si? Podría acabarmela de una sola vez...?

Hallando su sexo, se introdujo entre sus ropa, para tocar la punta con el índice, a comparación de sus heladas manos, aquella piel, se encontraba hirviendo. Le lemió lentamente el cuello, moridnedo donde no había heridas.

- Podría beber de donde yo quiera?

no hiso nada para detenerse abrio en cambio ligeramente las piernas para darle acceso total al mayor soltando leves gemidos de vez en cuando
con sus manos se aferro a la bata de este desatandola y bajandola lo suficiente para meter en su boca uno de los pezones del vampiro y jugar con este \
dejo el pecho del vampiro en paz y se aserco a su oido

bebe de donde se te antoje...

- Mmm, así lo haré...

Comenzó a mover su miembro de arriba a abajo en un suave vaivén, apretujandolo, mientrasle miraba a los ojos.

- ¿Por donde comenzar?...

Dijó ocn una sonrisa lujuriosa, mientras bajaba lentamente por su cuello lamiendolo por todo el camino que este recorría,de teniendose sobre su pezón, del cual lamió la aureola y después con tan solo la punta de la lengua estimularlo.

- Esta vez...será mi turno, esclavo...

Sussurró en un murmullo, soplando con su frió aliento sobre el pezón, haciendo pequeños circulos sobre la punta del sexo del moreno, cuando encajó un colmillo sobre su erecta tetilla.