Desayunando con Raziel (privado)

Llegaron hasta una cafetería pequeña pero acogedora, bastante tranquila y con poca gente. Sonrió complacido y se sentó en una mesa situada en un rinconcito, donde estaba seguro que no les molestaría nadie.

-Me gusta este sitió, es muy tranquilo – sonrió alegre mientras ojeaba la carta – mmmm.... yo quiero un vaso de leche y unas tortitas con nata y sirope de vainilla – le dijo con una sonrisa amable a la camarera que se acerco ha atenderles.

-torta?...- pregunta bien en su pais le enseñaron que era otra cosa.......

-yo quiero unas papas a la francesa comn mucha sl queso y catsup y una hamburguesa aca bien grasienta... y una soda light porfavor >0>- ordena con uan cara de amargado que no podia con ella e incluso que incomodaba.

-veo que te gusta lo dulce n_n- dice sonriendole a adrik

Se mordió ligeramente el labio para evitar reírse ante la cara que puso el híbrido al pedir, mirando disimuladamente la cara de espanto de la camarera, que apuntó al pedido con rapidez para marcharse a toda prisa.

-Si, me gustan mucho las cosas dulces, en especial el chocolate – aseguró con una sonrisa alegre – por el contrario no soporto las cosas amargas – arrugó la nariz en un gracioso gesto de desagrado para acentuar la información – en serio, no puedo con ellas.

a mi em encantan los dulces n_n- contest feliz, -pero papa n me deja comerlos, dice que morire de diabetes, ademas mi hermano es alergico alazucar asi que le d amiedo que a mi tambein me pase algo asi .-.

Sonrió con cierta tristeza en su mirada al escucharle hablar de su familia – tu padre se preocupa por ti... exagera un poco, pero eso quiere decir que te quiere – desvió la mirada, apoyando la cara entre las manos, tratando de disimular la punzada de dolor que le había recorrido al recordar a sus propios padres.

A penas era capaz de recordar alguna muestra de cariño de su madre cuando era pequeño, y ninguna en absoluto de su padre. Y ya crecido, lo mejor que había obtenido de ellos era su indiferencia. Daba gracias de que no eran borrachos violentos, por lo que no había recibido ninguna paliza, aun que si muchos insultos y alguna cachetada.

lo mira y se pomne al aldo de él y lo abraza

-pero no llores- le dice abrazandolo

-vamos no pienses cosas feas, que te dije que hoy te hiba a divertir ¿que no?- le da palmadas en la espalda y recibe su torta y se lapone en la mesa. -anda disfruta de tu dulce n__n

Enrojeció al sentirse abrazado, esbozando una pequeña sonrisa de agradecimiento ante el intento de consuelo por parte del otro – si, tienes razón, no sirve de nada darle vueltas a algo que ya no se puede cambiar – murmuró más animado.

Se llevó un trozo del dulce a la boca, saboreandolo con gusto mientras emitía un pequeño gemido de placer. Hacia tanto tiempo que no podía comer algo así que sus papilas gustativas parecían bailar de alegría en su boca.

-Delicioso.

.////.
se quedo como pasmado ante sa reaccion -enm..- nega con al cabeza

-si quieres podemso comprar todos los pasteles que quieras, no t e de pena n__n-

-Ah... no te preocupes, por ahora voy bien con esto – sonrió comiendo otro pedazo, emitiendo nuevamente un gemido, aunque más suave que el anterior – además, hay que mantener una dieta equilibrada, no es bueno comer demasiado dulce, si no me pondría gordo y ya no me querría nadie – bromeó sacando juguetonamente la lengua antes de dar otro bocado, con el correspondiente gemido – aunque es una pena que no se pueda vivir solo de dulces.

lo seguia mirando como atontado

-aja...- lo mirabahace todo tipo de gesticulaciones -ah, si, no como crees n_n si haces buen ejercicio podra cmer todo loq eu quieras n_n- le dice desatontandose

Rió suavemente negando con la cabeza – si haces ejercicio no pasa nada por comer en abundancia, pero tampoco es para reventarse a comer – le dijo señalandole con el tenedor, enfatizando con el gesto – además, si comes demasiado de algo te empachas y luego no puedes ni verlo – le explicó comiendo otro pedazo, mezclando una especie de ronroneo con el gemido de turno – es mejor no abusar de las cosas buenas, o pierden valor – sonrió con dulzura, inconsciente de lo que causaba en el otro con sus acciones.

esta bien D: l tomare encuanta- le dice mientra sllama a la mesera y esta l trae un infin de carnes y filetes

-ahh que delicia n_n-

Miró la cantidad de carne que le servían a Raziel y meneo suavemente la cabeza soltando un risita – me alegro de que vayas a tenerlo en cuenta – sonrió divertido antes de concentrarse de nuevo en su comida. Emitiendo aun pequeños gemiditos con cada bocado, pero ya prácticamente inaudibles y muy cortos.

No tardo demasiado en dejar finalmente el plato vacío, suspirando de felicidad al sentirse lleno y satisfecho con lo que había comido. Y lo mejor de todo no era la comida, si no tener una compañía agradable. Adrik lo apreciaba muchísimo debido a que apenas había tenido ocasión de disfrutar algo así.

*deoro racarne en un tris, dejando lipios los plais
-ah que delicia >w<- dice todo feliz y lleno

-te ha gustao?? queires algo mas?? - pregunta muy tranquilo y moviendo al cola de perro que tenia


-anda sin pena pide lo que quieras n_n la tarjeta paga

Miró un poco sorprendido la rapidez con la que Raziel vacío los platos. Nunca, jamas había visto a nadie comer a esa velocidad. No pudo evitar estallar en carcajadas, haciéndole extrañamente gracia aquello, y aun más por la cara de los que estaban alrededor, que miraban a Raziel pasmados.

-No quiero nada más, de verdad, estoy lleno – dijo jadeando, cuando al fin pudo parar de reír. Hacia mucho tiempo que no se reía de esa forma, ahora tenia que agarrarse las costillas de lo que le dolían de tanto reír – nos podemos ir si quieres.

o.o?? y a donde qieres ir?? te llevare a donde tu quieras n_n- le cntesta de uan manera alegre sin darse cuenta d la genta asu alrededor....

-dime a donde te gustaria ir?? no duces en decinrmelo n_N

Se mordió el labio inferior mientras pensaba a donde podrían ir ahora. Después de comer lo mejor y lo que más le apetecía era un lugar tranquilo y relajado donde poder reposar la comida. Podían ir a la playa, relajarse viendo el mar sobre la arena. La plaza... no, ese lugar quedaba descartado, demasiada gente allí. Con el parque sucedía un tanto de lo mismo, así que tampoco. El zoológico podría estar bien, aunque hubiera mucha gente los animales lo compensarían. También estaba el cine, ver una película estaría muy bien, hacia mucho tiempo que no veía ninguna. Y por ultimo, la laguna, también un buen lugar donde estar. No le venían a la mente más lugares.

-Bueno... no se me ocurre ningún lugar en concreto, creo que tanto playa, el zoológico o el cine estarán bien – se sonrojó ante el fugaz pensamiento de que eran los típicos lugares para una cita, pero enseguida se deshizo de ese extraño pensamiento. Los amigos también podían ir a esos lugares, no tenia nada de malo ir con Raziel.

unm...- se queda pensativo cn la mano en la barbilla y las prejas hacia atras

-ya se¡- dice alzando las orejas y golpeando la palma de la manocon su puñolevemente

-aun es temprano¡¡¡ podemos ir a la playa, caminar un rato par bajar la comida, despues de ahi podemos pasar al zoo, al in que nol cierran tan temprano, y que tal el cine, esta aun lado, ya que nos dara hambre de tanto caminar podemos comer palomitas y ver una peli.. y para cerrarcon broche de horo, que te parece ir a la aguna un tto?? pasear en un bote bajo la luna?? no suena genial???-

Al principio se quedo pasmado con todo el plan. Un día completo pasandolo con una persona que acababa de conocer aquel mismo día. ''Una cita con un niño que te a calado hondo en ese corazoncito tuyo muy rápido ¿un poco raro no crees?'' Adrik sacudió la cabeza, decidiendo no hacer caso a la burlona voz de su conciencia. No había nada malo, se divertirían compartiendo el día, y Raziel era un encanto de chico, por eso le caía bien, nada más.

-Me parece un plan estupendo – dijo sonriendo alegremente – haces muy bien los planes.

le sonrie -entonces vamonos n___n-

camina hacia la caja par apagar con su tarjeta de credito -andando, el tiempo es oro n__n- lo toma de la mano para salir de ahi y pasar un dia enial